Por: JJ Freeman
¿Tiempo de cosechar?
Estos días próximos tendrían que ser para los pescadores un periodo de definiciones, no sólo por la esperanza de recuperar la certificación de la pesquería de camarón -hoy embargada por Estados Unidos-, sino porque están asumiendo sus cargos los gobernadores recién electos en estados costeros, algunos de gran importancia para la actividad pesquera y acuícola nacional; ya lo hizo Alfonso Durazo en Sonora, también Víctor Manuel Castro Cosío en Baja California Sur y Miguel Ángel Navarro Quintero en Nayarit, igual que Layda Sansores San Román, gobernadora de Campeche. Este primero de octubre estará tomando posesión en Michoacán Alfredo Ramírez Bedolla; falta Rubén Rocha Moya en Sinaloa, quien tomará posesión el primero de noviembre de 2021; falta también Evelyn Salgado Pineda, de Guerrero (la hija de Macedonio), quien rendirá protesta el 28 de octubre; Marina del Pilar Ávila Olmeda en Baja California, quien asumirá como gobernadora el próximo 1 de noviembre, e Indira Vizcaíno en Colima, quien asumirá su cargo el 1 de noviembre.
Estos nueve estados (entre los que se incluyen los de mayor producción pesquera:Sonora, Sinaloa, Baja California y Baja California Sur) cuyos gobernadores y gobernadoras surgen de la elección más grande en la historia de México, celebrada en junio de este año, llegan con la gran responsabilidad de responder a la ciudadanía que votó por ellos y tratándose en entidades costeras, muchos votantes fueron (son) pescadores en activo que en su voto fincaron sus esperanzas de subsistencia y desarrollo en una actividad que ha venido a la baja en los últimos años. Y leímos las declaraciones en que muchos candidatos se comprometieron directamente con los productores.
En lo que va de esta administración 2018-2024, en los hechos hemos visto lo que para el sector pesquero se puede esperar de la federación, pero en el caso de los gobiernos estatales, cuyas autoridades, presupuestos y programas son (¿deberían ser?) independientes y autónomos, hay muchas esperanzas fincadas en que se revierta el centralismo hasta hoy mostrado en los gobiernos locales emanados de Morena en 2018, y se avance en la toma de decisiones para el necesario y urgente impulso al desarrollo de la actividad pesquera; si nos atenemos a las declaraciones, intenciones y compromisos de los gobernadores y las gobernadoras entrantes, lo que tendría que venir para el sector pesquero que votando ya hizo su parte, es una etapa de verdadera justicia social. Y sólo por preguntar… ¿tendrán que seguir sembrando los pescadores, o ya están en tiempo de cosechar?
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